El estado de Sonora se posiciona como el mayor productor de uva de mesa en el país con una producción de más de 300 mil toneladas, valuadas en millones de pesos
Las uvas son una de las frutas más consumidas durante el verano. En algunas ciudades del noroeste es común ver entre los carriles de los bulevares a personas ofreciendo bolsas de distintos tipos que llegan a las mesas de miles de familias prácticamente salidas del campo.
Mientras que en tiendas más exclusivas es común ver variedades especiales como la uva Cotton Candy, que se hizo viral en redes sociales por su dulzor similar al del algodón de azúcar. Lo que muchos no saben es que una gran parte de esta uva de mesa, incluyendo muchas que se comercializan en otros países, crecieron en Sonora, máximo productor a nivel nacional de uva de mesa.
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En 2022, la Oficina de Información Agropecuaria, Pesquera y Acuícola del Estado de Sonora (OIAPES) registró una producción de más de 308 toneladas de uva de mesa, generando un valor económico cercano a los 9.7 mil millones de pesos. Hermosillo, la capital del estado, lidera la producción con 10,314 hectáreas cultivadas, lo que resultó en 196,480 toneladas de uvas con un valor de producción de más de 6 mil millones de pesos.
Después de Hermosillo le siguen Caborca, Guaymas, Cajeme, San Luis Río Colorado y Ures, lugares en los que agricultores independientes o empresas siembran y después cosechan ese producto. Durante el año pasado fueron sembradas 17,051 hectáreas, en las cuales fueron cosechadas 16,627 hectáreas.
Las ciudades de Caborca y Guaymas también son centros importantes de producción de uva. Caborca cultivó 4,326 hectáreas en 2022, produciendo cerca de 80,000 toneladas con un valor de más de 2.5 mil millones de pesos. Por otro lado, Guaymas cosechó aproximadamente 27,000 toneladas de uva, equivalente a 783 millones de pesos.
Se espera una producción superior de uva de mesa para cerrar el 2023
A pesar de estos números impresionantes, la industria de la uva de mesa en Sonora enfrenta desafíos. En 2022, la escasez de mano de obra debido al traslado de trabajadores a Estados Unidos limitó la capacidad de producción. Sin embargo, las recientes lluvias en California podrían disuadir a los trabajadores de mudarse al norte, liberándolos para la cosecha en Sonora.
La Asociación de Productores de Uva de Mesa, liderada por Marco Antonio Camou, es optimista respecto al futuro de la industria. La previsión para la próxima cosecha es de más de 21.7 millones de cajas de uva de mesa, ligeramente por encima de las 21.3 millones cosechadas el año pasado. Esto se traduciría en un incremento significativo en términos de ingresos y empleo.
Sonora tiene una proyección ambiciosa para el 2023, con una superficie de cultivo estimada de 16,881 hectáreas, lo que probablemente resultará en una producción similar o superior a la del año anterior. A pesar de los desafíos, el estado está firmemente establecido como el líder indiscutible en la producción de uva de mesa en México.
Algunas de las empresas sonorenses que destacan a nivel internacional tanto en producción como comercialización, llegando a encontrar sus marcas en grandes cadenas, son Grupo Alta que lidera con la marca Divine Flavor. Por otra parte se encuentra la empresa Fresh Farms, parte de Molina Group, que en la actualidad cosecha más de 20 variedades de uva de mesa incluyendo la popular Cotton Candy.
¿A ti te gusta comer uva de mesa durante la temporada o solo en el ritual de Año Nuevo?
Fuente: El Sol de Hermosillo, Meganoticias, Fresh Plaza, Termómetro en Línea, El Imparcial.