A pocos días del inicio de la temporada de avistamiento de ballena gris en Baja California Sur, autoridades hicieron un llamado a prestadores de servicios y turistas a seguir las normas para proteger a este imponente mamífero marino.
Grecia Bojórquez/ NORO
La temporada de avistamiento de la ballena gris está a punto de comenzar en Baja California Sur, una actividad que atrae a miles de turistas cada año. Sin embargo, con el incremento del turismo, las autoridades locales hacieron un llamado a respetar los lineamientos establecidos para la protección de estas majestuosas criaturas y la preservación de su hábitat natural.

La Dirección Municipal de Turismo de La Paz y diversos expertos en conservación destacan la importancia de seguir las normas para disfrutar de este espectáculo natural sin causar daños a las ballenas ni a su ecosistema.
¿Qué dice la Norma Oficial Mexicana que regula la protección de la ballena gris?
La Norma Oficial Mexicana NOM-131-Semarnat-2010 regula el avistamiento de la ballena gris en las costas de Baja California Sur. Entre sus disposiciones más relevantes, se prohíbe el acoso de las ballenas, el daño a su entorno, y el impedimento de su libre desplazamiento.

También está estrictamente prohibido acercarse a las ballenas durante el apareamiento o el parto, así como separarlas de sus crías. Además, se prohíben actividades como la pesca, el buceo, la natación o el esquí acuático dentro de las zonas autorizadas, con el fin de no interferir con su comportamiento natural.
Por su parte, Natalia Ruffo Castaño, titular de la Dirección Municipal de Turismo, reiteró la importancia de que tanto los operadores turísticos como los visitantes respeten estas regulaciones. Esta normativa, que se aplica especialmente durante la temporada de migración, es fundamental para garantizar el equilibrio ecológico en las zonas de avistamiento.
¿Qué lugares de Baja California Sur son importantes para la conservación de la ballena gris?
Las lagunas de Baja California Sur, como Bahía Magdalena, San Ignacio y Ojo de Liebre, representan áreas de gran importancia para la conservación de la ballena gris. Estos ecosistemas ofrecen aguas protegidas y poco profundas que permiten a las ballenas llevar a cabo su proceso reproductivo en condiciones más seguras.

A lo largo de su migración desde el Ártico hacia las costas mexicanas, las ballenas utilizan estas lagunas como refugio para el apareamiento, la crianza de sus ballenatos y como un espacio libre de depredadores.
Laguna San Ignacio en Baja California Sur: refugio de la ballena gris
En un estudio realizado por estudiantes de la Universidad Autónoma de Baja California Sur, se identificaron dos grupos principales de ballenas en la Laguna San Ignacio: las madres con crías, que se concentran en las zonas más profundas, y los reproductores solitarios, que se ubican cerca de la entrada de la laguna. Este comportamiento refleja la adaptabilidad de la especie a su entorno, un factor clave para su supervivencia.

Es importante detallar que la especie ha enfrentado un declive en su población debido a la caza y la degradación del océano, por lo que el monitoreo constante de las ballenas grises y sus patrones migratorios es una práctica fundamental para evaluar su abundancia y éxito reproductivo. Esto hace aún más urgente la implementación de estrategias de conservación en Baja California Sur.

Expertos como los biólogos marinos subrayan que el avistamiento de las ballenas debe ser tratado con respeto y conciencia, tanto por parte de los operadores turísticos como por los propios visitantes.
El llamado a la responsabilidad en el avistamiento de ballenas se extiende a turistas, operadores y autoridades, quienes deben colaborar para garantizar que las lagunas de Baja California Sur sigan siendo un refugio seguro para estas criaturas.
Con información de Diario Humano, Big Fish y peninsular.digital.