El consumo de vino en México ha crecido significativamente, con Baja California liderando la producción nacional, este auge consolidó a la región como el epicentro vinícola.
Ricardo Amador/NORO
El consumo de vino en México registró un ascenso considerable en los últimos años, un cambio cultural que se refleja tanto en el aumento de la demanda interna como en la creciente sofisticación de los consumidores, y Baja California va al frente.
Según datos del Consejo Mexicano Vitivinícola, en 2003 el consumo per cápita de vino era de apenas 225 mililitros por habitante adulto. Sin embargo, para 2023, esta cifra alcanzó 1.3 litros, lo que demuestra un cambio considerable en los hábitos de consumo.

Este aumento se dio, en parte, por la diversificación de las ofertas de vinos nacionales y la mayor exposición de los consumidores a etiquetas extranjeras, lo que generó una mayor apreciación por la cultura del vino.
Aunque México todavía no alcanza los niveles de consumo de países europeos, el crecimiento sostenido de este mercado impulsó una mayor presencia de los vinos nacionales en las mesas mexicanas.

Se estima que en el país se consumen alrededor de 208 millones de botellas al año, de las cuales una gran parte corresponde a vinos mexicanos, una tendencia que sigue ganando terreno año tras año.
Baja California es líder de la producción vinícola de México
El estado de Baja California se consolidó como el principal productor de vino en México, con una participación de aproximadamente el 90% de la producción nacional. Su territorio alberga el 95% de la producción de vino de mesa del país y es hogar de unas 184 empresas vitivinícolas, según datos del portal BacoClub.

La región vitivinícola más relevante del estado es el Valle de Guadalupe, que cuenta con cerca de 3 mil 200 hectáreas de viñedos. Este valle se beneficia de un clima mediterráneo, que combina suelos fértiles con la influencia marítima, lo que favorece el cultivo de variedades de uva de alta calidad.
El éxito de Baja California no solo se debe a sus condiciones geográficas privilegiadas, sino también a la creciente profesionalización de sus vinicultores, que ya posicionaron a sus etiquetas en mercados internacionales, y han ganado premios de renombre para esta industria.
Impacto económico y turístico de la vitivinicultura en Baja California
Además de su rol como productor líder, Baja California aprovechó el auge vinícola para fortalecer su sector turístico. El enoturismo se convirtió en un pilar económico para la región, con eventos como las Fiestas de la Vendimia y la Ruta del Vino que atraen a miles de turistas nacionales e internacionales cada año.

De acuerdo con Provino Baja California, entre 800 mil y 1 millón de visitantes disfrutan cada año de las atracciones vinícolas del estado, y en 2023, la industria vitivinícola en Baja California reportó $3 mil 600 millones de pesos en ingresos y dio empleo directo e indirecto a unas 10 mil 500 personas.
Este fenómeno permite que la región no solo gane reconocimiento como un destino turístico de alto nivel, sino que también fomente el desarrollo cultural y gastronómico.
Desafíos y proyecciones para la industria vinícola nacional
A pesar del éxito de Baja California y el crecimiento general del consumo de vino en México, aún existen desafíos que la industria debe superar para consolidarse a nivel mundial.
Entre ellos se encuentran la necesidad de fomentar una cultura del vino más amplia en la población mexicana, mejorar la distribución de los productos vinícolas nacionales en todo el país y fortalecer la proyección internacional de las etiquetas mexicanas.

En este sentido, organizaciones como Vid Mexicana juegan un papel importante al promover el vino mexicano mediante plataformas que conectan a los productores con los consumidores, pero la capacidad de producción sigue siendo limitada, lo que obliga a recurrir a importaciones para satisfacer la demanda.
Para que México logre un liderazgo más sólido en el mercado global, será clave aumentar la capacidad de producción y la presencia de sus etiquetas en mercados internacionales.
¿Cuál es tu vino nacional favorito?
Fuentes: El Economista, Revista Única, Campestre