El vino Padre Kino se destacó en su época por ser bastante peculiar, en gran parte porque no utilizaba corcho, un factor que contribuyó a su eventual desaparición.
A lo largo de los años, México ha sido hogar de diversas marcas de vinos, como la famosa Casa Madero. Sin embargo, uno de los más populares durante las décadas pasadas fue el vino Padre Kino, producido por la compañía Pedro Domecq, pero que actualmente se encuentra descontinuado.
Lo que hizo que Padre Kino fuera único fue su botella sin corcho, con una forma que recordaba a un florero, lo que lo diferenciaba de otros vinos, tanto nacionales como internacionales. En 2011, este vino dejó de estar disponible en las tiendas de conveniencia y supermercados, marcando el fin de una era.
El nacimiento de un clásico: Padre Kino, el vino ideal para los mexicanos
Padre Kino llegó al mercado mexicano alrededor de 1975 y rápidamente se ganó el corazón de los consumidores por dos razones clave: su precio accesible y la facilidad de abrirlo sin un sacacorchos, lo que resultaba perfecto en un país con una cultura vinícola incipiente.
La etiqueta de este vino lucía con orgullo la leyenda “Valle de Guadalupe B.C.”, un nombre que en ese entonces no resonaba tanto entre las familias mexicanas, ya que esa región de Baja California apenas comenzaba a consolidarse como el destino vinícola que hoy conocemos.
El nombre del vino rendía homenaje a Eusebio Francisco Kino, un misionero italiano que exploró lo que hoy es Baja California, fundando misiones y cooperativas en el siglo XVII, según datos de la Real Academia de Historia (RAH).
Padre Kino tuvo un impacto considerable al acercar a los mexicanos a la industria del vino. Uno de sus slogans más recordados fue “Padre vino, ¡qué padre vino!”. Este tinto semidulce, con un contenido de alcohol de entre 11% y 13%, se utilizaba frecuentemente para preparar platillos navideños como el pavo, según la revista México Desconocido.
Otro de sus puntos fuertes fue su precio, que en su momento oscilaba por debajo de los 100 pesos, en sus versiones tinto y blanco, haciéndolo accesible en comparación con otras opciones más costosas.}
¿Qué provocó la desaparición del vino Padre Kino?
La última vez que las botellas de Padre Kino estuvieron en los estantes de los supermercados fue en 2011, cerrando así un importante capítulo en la historia vinícola de México.
Ese año, la Procuraduría Federal del Consumidor realizó un análisis de los vinos nacionales, revelando a Pedro Domecq que su emblemático producto ya no era tan rentable debido a la creciente competencia de vinos económicos, tanto nacionales como internacionales. Además, la aparición de envases de tetrapack terminó por eclipsar al icónico vino sin corcho.
¿Habías oído hablar de este legendario vino mexicano?