Después de una rigurosa inspección, dos aeronaves construidas por estudiantes y egresados de la Universidad Tecnológica de Guaymas fueron aprobadas por la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos
Dos aviones modelo RV12IS ensamblados en la Universidad Tecnológica de Guaymas (UTG) fueron recientemente certificados y aprobados por la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA).

Las aeronaves las construyeron estudiantes, egresados y docentes de la carrera de Ingeniería en Aeronáutica de la UTG. Después de su ensamblaje, las naves fueron trasladadas a Tucson, Arizona, donde la FFA realizó pruebas durante varios días.
Javier Carrizales Salazar, rector de la UTG, dijo que espera que en las próximas semanas estos aviones realicen su primer vuelo internacional de Tucson a Guaymas.

La certificación de estos aviones construidos en este puerto sonorense se realizó en dos etapas, de acuerdo a información de Forbes. La primera consistió en la revisión técnica y pruebas de tierra. La segunda etapa fue la prueba de vuelo, la cual obtuvo excelentes resultados, según Álvaro López Corral, docente de la universidad e integrante del proyecto.

Una oportunidad única e histórica para Guaymas
Carrizales Salazar explicó que el proyecto referente a estos aviones construidos en Guaymas nació en 2018 por iniciativa de Franklin Gaxiola, fundador de la empresa GA Aerospace Corporation. El empresario de la industria aeroespacial decidió invertir en beneficio de los jóvenes sonorenses.

Gaxiola adquirió las piezas en Estados Unidos y las envió a Guaymas, donde ensamblaron los aviones en su totalidad. Después de Quéretaro, Guaymas, Sonora, es la segunda región más importante en el país para las empresas aeronáuticas.
“Es un hecho histórico, no solo para la universidad sino del estado, lo cual nos llena de mucho orgullo”.
Javier Carrizales Salazar, rector de la UTG.
De esta manera, estudiantes y egresados de la UTG tuvieron la oportunidad y destreza de participar en este proyecto histórico para el estado de Sonora.
Con información de Forbes y Proyecto Puente.