Chihuahua Green es un ejemplo latinoamericano de desarrollo inteligente y colaborativo. La iniciativa empresarial que comenzó como un experimento local ahora es un referente internacional en sostenibilidad y economía circular.
Grecia Bojórquez/ NORO
Lo que hace unos años comenzó como un esfuerzo por cambiar la mentalidad empresarial en Chihuahua, hoy se presenta en foros internacionales como ejemplo a seguir. Chihuahua Green, una plataforma impulsada desde el sector privado, ha logrado posicionarse como una de las iniciativas más innovadoras en materia de sostenibilidad en América Latina.

Durante el Simposio Latinoamericano de Biodiversidad y Cambios Climáticos, celebrado en Foz de Iguazú, Brasil, el proyecto fue presentado como caso de éxito en transición circular, simbiosis industrial y descarbonización territorial.
La ponencia, a cargo de Víctor Gómez-Céspedes, representante de Coparmex Chihuahua y líder del proyecto, titulada “Simbiosis Industrial y Transición Circular: Estrategias para el Desarrollo Territorial Sostenible” captó la atención de representantes de gobiernos, organismos multilaterales y tomadores de decisiones.

Chihuahua Green no es una oficina de gobierno, ni un organismo tradicional: es una oficina facilitadora público-privada que mapea el ecosistema empresarial local para generar conexiones estratégicas entre empresas, con el objetivo de reutilizar recursos y reducir residuos industriales. En pocas palabras, pone en práctica la economía circular con resultados tangibles.
Cómo funciona Chihuahua Green
El corazón de Chihuahua Green está en su capacidad de identificar sinergias industriales, utilizando herramientas tecnológicas como mapeo de recursos, cálculo de emisiones y un “marketplace” de residuos, la plataforma logra conectar a empresas que, de otro modo, no habrían colaborado entre sí.

Gracias a este modelo, residuos que antes se desechaban ahora encuentran una segunda vida. Uno de los primeros casos de éxito fue el de Recilogic, empresa que transformó residuos industriales de General Electric HealthCare en suelas ecológicas para calzado. Otro ejemplo destacado es la alianza entre Interceramic y Grupo Cementos de Chihuahua, que desarrollaron blocks ecológicos para el sector de la construcción.
Este enfoque colaborativo no solo reduce el impacto ambiental, sino que también abre nuevas líneas de negocio. Pequeñas y medianas empresas (PyMEs) han comenzado a replicar estos esquemas, mejorando su competitividad al mismo tiempo que adoptan procesos más limpios.
Chihuahua Green ejemplo para Lationamérica
Chihuahua Green ha logrado establecer una red de cooperación que incluye a la Unión Europea, al programa International Urban and Regional Cooperation (IURC) y al Estado de Paraná, con quien ya se exploran vías de colaboración técnica.

Durante el evento en Foz de Iguazú, delegaciones de Guanajuato, Yucatán y Jalisco también mostraron interés en replicar el modelo chihuahuense, dando paso a conversaciones formales para compartir metodologías y tecnologías. Este tipo de alianzas muestran que, aunque el origen de Chihuahua Green es local, su impacto y relevancia ya cruzaron fronteras.
Gómez-Céspedes subrayó ante los asistentes que el modelo funciona precisamente porque nace desde la iniciativa empresarial, pero se fortalece gracias a la colaboración con gobiernos y organismos multilaterales.
“Hoy más que nunca queda claro que la sostenibilidad en América Latina se construye desde lo local, pero con visión regional y voluntad compartida”, expresó.
Un modelo líder en sostenibilidad
Los impulsores de Chihuahua Green son conscientes de que el camino apenas comienza. Hay desafíos técnicos y sociales por resolver, como el manejo de llantas fuera de uso, la incorporación de más PyMEs al modelo circular y el fortalecimiento de la infraestructura de residuos en la ciudad.

Al final de todo, lo que diferencia a Chihuahua Green no es solo su enfoque ambiental, sino su lógica de conexión. En vez de imponer soluciones, detecta oportunidades a partir del diálogo entre sectores productivos. Este enfoque ha sido fundamental para cambiar la percepción de la sostenibilidad como una carga, y transformarla en una ventaja competitiva.
Chihuahua, que hasta hace pocos años no figuraba en el mapa de la innovación ambiental, hoy es un ejemplo de líder latinoamericano en sostenibilidad. La experiencia de Chihuahua Green demuestra que el cambio estructural no necesita arrancar desde las grandes capitales ni depender exclusivamente de los gobiernos: basta con una visión clara, alianzas estratégicas y voluntad de colaboración.
Con información de El Diario de Chihuahua y chihuahuagreencity.org.