El mercado de Sonora es uno de los más famosos y antiguos de la Ciudad de México, donde se pueden encontrar todo tipo de productos relacionados con la magia, la santería, el esoterismo y la medicina tradicional. Desde hierbas, velas, amuletos y talismanes, hasta animales vivos, huesos humanos y rituales de limpieza, el mercado de Sonora ofrece un panorama de la cultura popular mexicana y sus creencias.
Para llegar al mercado de Sonora en metro, hay que tomar la línea 1 (rosa) y bajarse en la estación Merced, que es la penúltima del recorrido. Al salir del metro, hay que caminar unos metros hacia el sur por la calle Rosario, hasta llegar a la esquina con Fray Servando Teresa de Mier, donde se encuentra la entrada principal del mercado. El costo del boleto de metro es de 5 pesos y el horario es de 5:00 a 24:00 horas de lunes a viernes, y de 6:00 a 24:00 horas los sábados y domingos.

El mercado de Sonora está abierto todos los días de 9:00 a 18:00 horas, y cuenta con más de 2,000 locales distribuidos en varios pasillos. Se recomienda ir con tiempo, paciencia y curiosidad, ya que el mercado es muy grande y variado, y se puede encontrar de todo. Algunos de los productos más solicitados son las figuras de santos, ángeles y demonios, los perfumes y aceites para el amor, el dinero y la salud, las cartas del tarot y otros métodos de adivinación, los inciensos, las flores y las frutas para las ofrendas, y los animales exóticos como iguanas, serpientes, loros y lechuzas. También hay locales que ofrecen servicios de lectura de mano, limpia de aura, amarres de pareja y despojos de mala suerte, entre otros.
El mercado de Sonora es un lugar único y fascinante, que refleja la riqueza y la diversidad de la cultura mexicana. Sin embargo, también hay que tener cuidado y respeto, ya que no todos los comerciantes son honestos y algunos pueden aprovecharse de la ingenuidad o la necesidad de los clientes. Además, hay que ser conscientes de que muchos de los productos que se venden tienen un impacto negativo en el medio ambiente y en la biodiversidad, como los animales en peligro de extinción o las plantas medicinales sobreexplotadas. Por eso, se aconseja visitar el mercado de Sonora con una actitud crítica y responsable, y disfrutar de su magia sin caer en el engaño.

Una de las atracciones más interesantes del mercado de Sonora es el pasillo dedicado a la santería, una religión sincrética que combina elementos del catolicismo, el yoruba y el espiritismo. En este pasillo se pueden encontrar imágenes, velas, collares, estatuillas y otros objetos relacionados con los orishas, las divinidades de la santería. Cada orisha tiene su propio color, símbolo, animal y ofrenda, y representa un aspecto de la naturaleza o de la vida humana. Por ejemplo, Elegguá es el dueño de los caminos y el destino, y se le identifica con el rojo y el negro, el ratón y el coco. Oshún es la diosa del amor, la belleza y el río, y se le asocia con el amarillo, el girasol y el abanico. Yemayá es la madre de todos los seres, la reina del mar y la protectora de las mujeres, y se le reconoce por el azul, la concha y el melón.

Los creyentes de la santería acuden al mercado de Sonora para comprar los materiales necesarios para sus rituales, como las hierbas, los frascos, los perfumes, las veladoras y las medallas. También buscan la ayuda de los santeros, que son los sacerdotes de esta religión, que les hacen consultas, limpias, iniciaciones y sacrificios. Los santeros cobran diferentes precios según el tipo y la complejidad del servicio, y algunos aceptan pagos en especie, como joyas, ropa o electrodomésticos.