La sinaloense Felipa Velázquez fue una figura clave en la lucha por los derechos de los campesinos en Baja California.
Grecia Bojórquez/ NORO
Felipa Velázquez López nació el 1 de mayo de 1882 en La Noria, una pequeña sindicatura de Mazatlán, Sinaloa. Felipa se convirtió en una figura emblemática de la lucha social en México, quien se destacó no solo como poeta y compositora sino también como pionera del movimiento agrarista.
Desde joven, Felipa demostró un espíritu autodidacta y rebelde, que rompió con los moldes tradicionales impuestos a las mujeres de su época. A pesar de vivir en una sociedad patriarcal, Velázquez López no solo se dedicó a la docencia y la poesía, sino que también se involucró activamente en la defensa de los derechos de los campesinos.
La vida de Felipa Velázquez estuvo marcada por una firme convicción en la justicia social y la igualdad, rasgos que se reflejaron en su obra y en sus acciones.
Felipa Velázquez fue parte del movimiento agrarista en Baja California
En 1928, Felipa Velázquez se mudó con sus hijos al Valle de Mexicali, Baja California. Esta región, dominada en su momento por la Colorado River Land Company, estaba caracterizada por la explotación y marginación de los trabajadores mexicanos, quienes eran relegados a condiciones de extrema pobreza.
Desde su llegada, Felipa se convirtió en una líder importante entre los campesinos, organizando reuniones clandestinas, luchando por los derechos a la tierra y abogando por salarios justos.
En 1930, su activismo la llevó a un enfrentamiento con las autoridades, donde la quema de un puente de madera sirvió como pretexto para su arresto y marcó un punto crítico en su vida.
Acusada de este acto junto con sus hijos y otros líderes agrarios, Felipa fue encarcelada y enviada a las Islas Marías, un destino caracterizado por inhumano para los prisioneros políticos de la época. Esta experiencia de represión formó parte de su historia en la lucha, sin embargo, no detuvo su determinación.
Después de cuatro meses tras las rejas, la activista social fue puesta en libertad debido a la presión ejercida por la Confederación Campesina, que amenazó con iniciar una huelga. Una vez en libertad, la defensora de los derechos campesinos se trasladó para residir en el puerto de Mazatlán, donde falleció en 1949.
Su pelea fue parte de un movimiento agrarista más amplio, conocido como «El Asalto a las Tierras», que culminó en 1937 con la repartición de tierras en el Valle de Mexicali bajo el gobierno de Lázaro Cárdenas.
La poesía de Felipa Velázquez
Felipa Velázquez no solo fue una luchadora social; su talento como poeta también dejó una marca importante en la literatura mexicana. Su obra, cargada de un profundo sentido de justicia y amor por la humanidad, refleja su ideología anarquista y su compromiso con la igualdad.
En su poema «Hacia la lucha», Felipa hace un llamado a la participación activa en la lucha por la libertad y la emancipación, destacando su visión de una sociedad más justa y equitativa.
“Yo aborrezco la maldad,
Maldigo la tiranía
Amo la fraternidad,
Desprecio a la burguesía”, señala el fragmento del poema «Hacia la lucha» de Felipa Velázquez.
Sin duda, los versos de Velázquez son testimonio de una sensibilidad que fusiona el fervor revolucionario con la poesía. En un contexto donde la expresión artística de las mujeres era frecuentemente invisibilizada, la poeta anarquista utilizó sus palabras como una herramienta de resistencia y protesta.
La poesía de la sinaloense no solo abordó temas políticos y sociales, sino que también reflejó su fervor por el bienestar de los oprimidos y explotados.
Congreso de Sinaloa propone poner el nombre de Felipa Velázquez en el Muro de Honor
La vida de Felipa Velázquez López estuvo marcada por un compromiso inquebrantable con la justicia social y los derechos de los campesinos. A pesar de enfrentar una sociedad que limitaba severamente el papel de las mujeres, Felipa se destacó en varios frentes: como educadora, poeta y activista.
Ante el reconocimiento del legado e importancia de la figura de Felipa Velázquez López, el Congreso de Sinaloa propuso añadir su nombre al Muro de Honor en el salón de sesiones.
Con información de La Cadera de Eva, Línea Directa y Debate.
