En Mexicali, Baja California, el Mercado Cine Curto trajo de nuevo a la vida uno de los espacios más emblemáticos de la ciudad para convertirlo en un punto de reunión
Ubicado en el centro histórico de Mexicali, el Mercado Cine Curto ha sido un faro de la cultura y la historia de la ciudad durante más de 70 años. Inicialmente conocido por ser un cine, el espacio resistió la prueba del tiempo y hace un par de años fue rescatado y reinventado para el disfrute de las nuevas generaciones como algo más que solo un cine.
Fundado en 1946 por un empresario español llamado Adolfo Curto, este recinto tuvo un gran auge en los años 50. Cine Curto se convirtió en un popular destino para los amantes del cine, ofreciendo una diversa gama de películas que generaban alegría, suspenso y risas en las caras de los mexicalenses durante aquellos años que el entretenimiento se encontraba fuera de la pantalla de un teléfono celular.
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Sin embargo, con la llegada de la digitalización y la presión de las grandes cadenas de cine, el futuro del Cine Curto hizo que se convirtiera en un espacio abandonado.
La nostalgia y el apoyo de la comunidad salvó a este emblemático establecimiento y en 2021 fue transformado en el Mercado Cine Curto.
Este espacio ha sido cuidadosamente restaurado y ahora honra su herencia a la vez que proporciona un punto de encuentro para la comunidad de Mexicali.
El Mercado Cine Curto da espacio a la gastronomía y el arte
El Mercado Cine Curto no es solo un lugar para pasar el tiempo. Se ha convertido en un punto de referencia para la socialización, el intercambio cultural y la economía de la ciudad. Aquellos que pasean por sus pasillos pueden disfrutar de una gama de experiencias, pero sobre todo aquellas que toman lugar alrededor del buen comer, pues en este lugar ahora se puede degustar distintas propuestas gastronómicas desde tacos y mariscos frescos, hasta hamburguesas jugosas, carnes a las brasas y la auténtica comida mexicana gourmet.
No solo hay restaurantes. En el Mercado Cine Curto también se encuentran siete cerveceras artesanales de Mexicali. Igualmente, una mezcla de tiendas de accesorios, una enoteca donde se pueden degustar vinos de la región del Valle de Guadalupe, una librería y una cafetería.
Además, este espacio en el que alguna vez estuvo Pedro Infante, también se ha convertido en un foro cultural donde de forma regular se realizan distintas actividades rodeadas de la herencia del antiguo cine y la atmósfera nostálgica que aún perdura.
Aquí, la esencia del pasado se fusiona con la modernidad, creando un ambiente mágico que te transporta a otra época pero con la música que suena hoy, como la de Caloncho, Charles Ans, Siddhartha, Tiranos del Norte, Little Jesus y Daniel, me estás matando, así como DJs y músicos locales e internacionales que se anuncian en la cartelera.
Los amantes del cine también pueden regocijarse, ya que la tradición continúa con la proyección regular de películas clásicas, resucitando el espíritu del antiguo Cine Curto. Este tipo de eventos además de otros como shows de Stand Up suceden en la Sala de Proyección, un espacio privado que cuenta con una gran pantalla y unas butacas estilo escalón.
El renacimiento del Mercado Cine Curto es un testimonio de lo que puede lograrse cuando una comunidad se une para preservar su patrimonio cultural. Hoy, el mercado es un símbolo de la resiliencia y el espíritu de Mexicali pero adaptado a lo que más disfrutan las nuevas generaciones.
¿Qué espacio abandonado de tu ciudad se podría convertir en un mercado o algo similar a este proyecto?
Fuente: Mercado Cine Curto, La Voz de la Frontera, Concanaco Servytur México, El Imparcial.