La verdad sobre el frío y las enfermedades respiratorias de temporada. Una investigación de la UNAM desmiente algunos mitos y ofrece algunos consejos para protegerse durante esta temporada.
Con la llegada del invierno, surge una pregunta recurrente entre la población: ¿Es verdad que exponerse al frío puede hacernos más propensos a enfermedades? Esta interrogante ha generado diversas opiniones a lo largo del tiempo, alimentando algunos mitos sobre la relación entre las bajas temperaturas y la salud.
La creencia de que el frío es la principal causa de estas dolencias ha sido desmentida por expertos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), quienes aclaran que más allá de la vestimenta, existen otros factores que favorecen la propagación de virus y bacterias en esta temporada.
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Aunque las bajas temperaturas, la lluvia y el aire seco no generan enfermedades, sí crean condiciones propicias para que los virus y bacterias se reproduzcan más rápido en el aire seco del ambiente. Además, los rinovirus prosperan a temperaturas de entre 33 y 35 grados centígrados, coincidiendo con las condiciones de las fosas nasales y vías respiratorias superiores.
¿Por qué aumentan las enfermedades respiratorias en invierno?
La UNAM destaca que son los virus y bacterias los verdaderos causantes de estas enfermedades, no las condiciones climáticas. Además, el clima extremadamente frío favorece la reproducción rápida de estos microorganismos en el aire seco, facilitando su transmisión al cuerpo humano, que, al mismo tiempo, experimenta una disminución de células inmunitarias.
La calefacción interior y la consiguiente sequedad del aire, junto con la ventilación reducida en espacios cerrados, contribuyen a la irritación de las vías respiratorias y facilitan la entrada de virus. Estos factores crean un entorno propicio para el aumento de enfermedades respiratorias en el invierno.
Es por ello que la recomendación de abrigarse bien en el invierno no está relacionada con la prevención de enfermedades por el frío.
La UNAM explica que abrigarse impide que el aire frío pase directamente a la boca y la nariz, evitando la inflamación de las mucosas y paredes internas. Sin embargo, más allá de la ropa, existen otras medidas clave para protegerse.
El papel del clima y el sistema inmunológico
La relación entre el clima frío y las enfermedades respiratorias es compleja. La Dra. Virginia Banks de Northeast Ohio Infectious Disease Associates explica que el frío facilita la supervivencia y reproducción de virus en el aire seco del invierno.
Con la llegada del invierno no solo aumentan las enfermedades respiratorias, según algunos estudios, las bajas temperaturas pueden tener efectos adversos en la salud cardiovascular, aumentando el riesgo de ataques cardiacos y hospitalizaciones por accidentes cerebrovasculares.
Además, la temporada impulsa la congregación en espacios pequeños y cerrados, aumentando las posibilidades de propagación de virus entre personas.
¿Cómo protegerse adecuadamente de las enfermedades respiratorias?
La UNAM aconseja no solo abrigarse correctamente, sino también tomar medidas preventivas adicionales. La aplicación de vacunas contra la gripe, influenza y Covid-19 es fundamental, especialmente para adultos mayores y niños, quienes son más susceptibles.
Mantener una alimentación equilibrada rica en proteínas y vitamina C ayuda a fortalecer el sistema inmunitario.
Además, también invitan a beber líquidos para mantener una buena hidratación y seguir prácticas de prevención, como el uso de cubrebocas en lugares cerrados, sobre todo cuando exista algún síntoma de alguna enfermedad respiratoria.
Claro que abrigarse es importante durante esta temporada, pero la prevención de enfermedades respiratorias en invierno va más allá de la vestimenta. La vacunación, hábitos saludables y medidas preventivas son clave para mantener la salud en esta temporada.
¿Te han dicho que no salgas sin tu suéter o chamarra?
Fuentes: El Universal, Heart, National Geographic, New York Times