Por segunda ocasión Hermosillo obtiene el Récord Guinness por realizar la carne asada más grande del mundo.
El domingo 26 de febrero el centro histórico de la capital sonorense se cubrió de los olores tradicionales de una auténtica carne asada al carbón, las tortillas de harina para hacer los tacos y una variedad de salsas rojas y verdes.
Amigos y familias se dieron cita al lugar para completar una larga fila de asadores en un evento público, con un ambiente para todas las edades con música en vivo y mucho sabor sonorense.
Cinco toneladas de carne fueron puestas en las brasas por 2 mil 186 parrilleros que asaron de forma simultánea para lograr el récord.
Para ser parte de este evento, los participantes debieron adquirir un kit que incluía: cuatro kilos de carne por cada pareja concursante, carbón, salsa, tortillas y sal. Un asador conmemorativo, una gorra y un mandil. Todo esto con un costo de 3 mil 500 pesos.
Ciudad Capital de la Carne Asada
El récord anterior le pertenecía a Canadá, donde obtuvieron este premio con 916 parrilleros en 2015.
El gobernador de Sonora, Alfonso Durazo, presente también como parrillero dijo que “es un honor ser parte de este evento que certifica a nivel internacional a Hermosillo como Ciudad Capital de la Carne Asada. Pero también a nuestro estado como entidad de nuestro país productora de la mejor carne de México, que nos ha distinguido históricamente y que, con este récord, nos ratificamos”.
Estuvieron presentes también el secretario de turismo Miguel Torruco Marqués y el alcalde de la ciudad, Antonio Astiazarán.
La jueza de los Récord Guinness certificó durante la tarde a Hermosillo como la Ciudad Capital de Carne Asada.
Carne asada, tradición sonorense
La carne asada es una tradición sonorense por excelencia. Durante años ha sido el pretexto perfecto para reunirse los domingos en familia, para conversar con los amigos o para festejar cualquier buena noticia y es parte de la historia gastronómica de Sonora.
Se dice que el hecho de prender el carbón y hacer humo en los patios y las banquetas sonorenses, es un ritual que viene de los ranchos y se trasladó a las ciudades apelando a la nostalgia de la gente de la sierra que emigró a las ciudades principales.
La carne asada en tacos o en burros, es sin duda la primera recomendación culinaria que ofrece un sonorense a las personas que visitan el estado provenientes de otros lugares de la república o del mundo. Los rostros al probar los tacos norteños son la mejor respuesta que se puede recibir de vuelta. Los sonorenses llevan como bandera este platillo hacia cualquier lugar que vayan y defienden el sabor original a capa y espada. De harina o de maíz, “blandito” o “semidorado”, la carne asada es nuestra y oficialmente Sonora tiene la Ciudad Capital de la Carne Asada.
¿Se va a hacer o no se va a hacer? ¡Se tenía que hacer! ¡La carnita asada!
Fuentes: As México, Proyecto Puente, Aristegui Noticias, El Universal