Ubicado en San Pedro de la Cueva, Sonora, el Museo Andrés Avelino Flores recoge la historia de los pueblos alrededor de la presa El novillo. Su principal atractivo es el acervo en torno a la matanza de 86 hombres a manos de Pancho Villa en 1915
Inaugurado el 15 de mayo de 2021, el Museo Andrés Avelino Flores es un espacio independiente gestionado por la artista visual María Tarazón y la cronista municipal María Esther Noriega Encinas, de la comunidad de San Pedro de la Cueva, Sonora, con el objetivo de ofrecer a la comunidad local y de los pueblos alrededor de la presa El Novillo una forma de preservar la memoria colectiva.
El museo costumbrista tiene un acervo de más de 200 piezas, entre artesanías, indumentarias y herramientas, sin contar los documentos oficiales, entre los que destacan la concesión de tierras a particulares con la firma de Porfirio Díaz.
Sin embargo, la exposición que más llama la atención es sobre la matanza cometida por Francisco “Pancho” Villa, el 2 de diciembre de 1915.
Además, se expone la historia de los pueblos desaparecidos de Batuc, Tepupa y Suaqui, que fueron inundados en 1964, cuando entró en funcionamiento la presa Plutarco Elías Calles, también llamada El Novillo.
Matanza del 2 de diciembre de 1915
Eran tiempos de la Revolución Mexicana. Los pobladores de San Pedro de la Cueva eran acechados por bandidos que aprovechaban la inestabilidad que se vivía en el país.
El ejército de Francisco Villa realizaba una campaña por el lugar el 1 de diciembre de 1915, cuando fue recibido a balazos por los pobladores, que lo confundieron con una partida de bandoleros.
Eso desató la furia del caudillo apodado “El Centauro del Norte” que ordenó la matanza al día siguiente. El padre Andrés Avelino López se opuso y fue asesinado por el propio Villa. En su honor, se nombra el museo costumbrista de San Pedro de las Cuevas.
Historia del Museo Andrés Avelino Flores
Durante muchos años, Esther Noriega se encargó de organizar las conmemoraciones de la matanza de Francisco Villa hasta que en 2015, junto al señor Pastor Noriega, hablaron con el entonces presidente municipal de San Pedro de las Cuevas, Juan Efrén Catillo, para organizar un museo por el centenario de dicho acontecimiento.
Con ayuda de los propios habitantes del pueblo, recolectaron piezas y testimonios de la época y consiguieron una casa para montar la exposición temporal, que duró cinco días.
La exposición se repitió los años siguientes hasta que María Tarazón, una artista visual, ofreció una casa para que la exposición fuera permanente. Así, después de muchos años de buscar un espacio, nació el Museo Andrés Avelino Flores.
300 años de San Pedro de la Cueva
Actualmente, el Museo Andrés Avelino Flores cuenta con otras exposiciones, además de la del 2 de diciembre de 1915, que reflejan la historia, costumbres y tradiciones de San Pedro de la Cueva y los pueblos alrededor de la presa El Novillo
En entrevista para Proyecto Puente, la profesora y cronista contó que todo el material expuesto ha sido donado por los locales y que no cuenta con el apoyo económico del gobierno ni de ningún particular.
María Tarazón y ella se encargan del mantenimiento del lugar, al que le hacen falta vitrinas, aire acondicionado y otras adecuaciones para la mejor conservación de las piezas.
Fuentes: Domiplay, Lado, Instagram Museo Andrés Avelino Flores, Colegio de Sonora, El Sol de Hermosillo