La carne roja se relaciona al pecado, al provenir de animales de sangre caliente; asimismo, se asocia a los placeres y lujuria, por lo que se evita durante Cuaresma
Inició la Cuaresma y con ella uno de los actos que más llama la atención: ¿Por qué no se puede o debe comer carne roja? Pues este tema depende mucho de las tradiciones religiosas de cada hogar y varía dependiendo los días y hasta el tipo de carne.
Esta temprada siempre inicia con el Miércoles de Ceniza y culmina con el Domingo de Resurrección que marca también el final de la Semana Santa y durante este lapso suele evitarse comer la carne roja.
Primero que nada, religiosamente este acto significa la preparación para vivir la pasión, muerte y resurrección de Jesús quien se sacrifica por los pecados del hombre; y a manera de veneración se prohíbe este alimento, que tiene muchos significados.
Muchas personas acostumbran dejar de comer estos alimentos durante los 40 días de la Cuaresma, mientras que otras más suelen sólo evitarlas durante el Miércoles de Ceniza y todos los viernes siguientes hasta la Semana Santa.
Habitualmente se sustituye la carne roja por carnes blancas como lo son pollo y pescado principalmente; incluso también muchas personas acostumbran ayunar en este periodo.
Carnes blancas por carne roja
Además, no se consume porque se relaciona al pecado por venir de animales de sangre caliente; asimismo se asocia a los placeres y lujuria por lo que se evita durante esta temporada.
En tanto, se sustituye por carnes blancas provienen de animales del agua y se considera volátil; aunque realmente se refiere al origen de los alimentos.
También se considera importante que durante la esta temporada lo más importante no sea sólo por la ingesta de alimentos, sino por los actos y acciones de caridad en favor de ayuda al prójimo.
Así que lo más importante radica en el comportamiento día a día, más allá de las costumbres que también son válidas en la época de reflexión.
Fuente: Milenio/El Sol de Hermosillo