El benching es una de las tendencias de citas más dañinas de la actualidad. En este artículo, te explicamos en qué consiste y por qué se ha vuelto popular entre las nuevas generaciones.
El benching se refiere a la situación en la que una persona mantiene un contacto superficial y esporádico con otra, solo para mantener su interés, sin intención de entablar una amistad o una relación significativa. Esta manipulación emocional convierte a la persona afectada en un “suplente”, manteniéndola en el “banquillo” por si no surge una opción mejor.
El objetivo es que la persona no olvide a quien practica el benching, pero sin ser realmente valorada.A diferencia del ghosting o el slow fading, en el benching la interacción no desaparece del todo. La persona afectada sigue recibiendo señales de interés, lo que le hace mantener la esperanza de una relación significativa. Esto la mantiene atenta y disponible para quien la manipula.
Benching: un fenómeno vinculado a las redes sociales
El benching, al igual que el ghosting, está estrechamente relacionado con las redes sociales, las cuales han transformado nuestras formas de relacionarnos y establecer amistades o relaciones románticas y/o sexuales. Aunque estas interacciones requieren habilidades y herramientas para gestionarlas adecuadamente, la práctica del benching puede tener graves consecuencias emocionales.
Los mensajes esporádicos de quien practica esta situación generan en la persona afectada dependencia, estrés emocional y frustración, impactando negativamente en su salud mental. La psicología explica que los mensajes de personas que nos atraen pueden provocar reacciones placenteras y adictivas en nuestro cerebro. Quien realiza benching utiliza esta táctica para mantener el contacto a través de redes sociales, asegurándose de que el “plan B” no pierda el interés.
Cuanto más tiempo dura esta situación, peores son las consecuencias para la persona afectada, quien se vuelve menos capaz de romper con la relación tóxica y más dependiente emocionalmente. Además, durante este tiempo, la persona afectada puede estar ignorando otras oportunidades de relaciones más saludables, aislándose progresivamente.
Con el tiempo, el comportamiento tóxico de quien practica el benching hace que la persona afectada se vuelva más dependiente y menos segura. La persona que practica esto suele ofrecer citas sin lógica sentimental, sino más bien por conveniencia y egoísmo. La persona afectada sufre cada vez que es ignorada, pero vuelve a caer en la trampa cuando es nuevamente contactada, lo que multiplica su dolor y alimenta sus inseguridades.
¿Cómo saber si te están haciendo benching?
La psicóloga clínica especializada en psicología de catástrofes, crisis y emergencias originaria de Ecuador, Andrea Fernández García, señala cinco señales que pueden indicar si alguien te está haciendo benching:
- Muestra interés por tener encuentros, pero nunca concreta el momento.
- Aunque se llegue a concretar una cita, siempre surge alguna excusa y no se realiza.
- Tras un periodo de contacto estrecho, sin motivo aparente empieza a mostrarse distante y fría.
- No hay personas en su entorno que conozcan tu existencia.
- Puede interactuar con tus redes sociales, pero no responde a tus mensajes.
¿Alguna vez te han hecho benching?