En Culiacán, las papas locas son una parada obligada; tanto para nacionales como para, extranjeros es necesario probar este manjar de los dioses para el calor, para el hambre o por el puro gusto de disfrutar una botana tradicional
Un arte culinario. En Culiacán, desde hace muchos años existe una combinación de sabores e ingredientes que es armonía pura para el paladar: las papas locas.
Y es que nada mejor que botanear cuando aparece el hambre. Con las papas locas existe una combinación entre frescura, comida saludable y lo frito que nunca debe faltar.

Desde hace muchos años, en las calles de Culiacán se combinó papas naturales fritas, con la frescura del pepino, lo delicioso de las salchichas y lo crujiente de los cacahuates japoneses, que junto a las salsas inglesas, de soya y picante da un toque que maravilla.
Eso sí, el sabor especial lo da el limón junto a las salchichas, que le ponen ese toque ideal para tener una botana deliciosa. Además, no falta el chamoy y los rielitos.

Como sabemos, en gustos se rompen géneros, y como parte de la tradición por las papas locas existe la oportunidad de variarlas en su contenido, por ejemplo, ponerle más zanahoria y jícamas, o también una buena combinación de gomitas. El chilito le da ese extra siempre necesario.
Además, algunos vendedores usan un jugo de tomate para acompañar las papas locas y darles, por supuesto, un toque más fresco del que ya goza.

Las papas locas deben ser naturales
Eso sí, las papas deben ser naturales, bien fritas y cortadas de forma casera para darle ese sabor especial que se agrega a la combinación de ingredientes que dan frescura y dulzura únicas.
En Culiacán las papas locas son una parada obligada; tanto para nacionales como extranjeros es necesario probar este manjar de los dioses para el calor, para el hambre o por el puro gusto de disfrutar una botana tradicional.
¿Has probado alguna vez las papas locas?
Fuente: El Sol de Sinaloa