Los incendios forestales en el noroeste de México inician en mayo y se extienden hasta septiembre, coincidiendo con la sequía, altas temperaturas y vientos fuertes.
Ricardo Amador/NORO
La temporada de incendios forestales en el noro, que comprende los estados de Baja California, Baja California Sur, Sonora, Chihuahua, Sinaloa y Durango, tiene lugar entre los meses de mayo y septiembre.

Este periodo coincide con la época de mayor estiaje en la región, caracterizada por la ausencia de lluvias, altas temperaturas y la presencia de vientos intensos. Estas condiciones climáticas son ideales para que la vegetación seca y los suelos vulnerables se conviertan en el combustible perfecto para la propagación del fuego.
Según datos de la Comisión Nacional Forestal (Conafor), el noroeste es una de las regiones más afectadas por incendios debido a su vegetación árida y las condiciones extremas del clima.
Durante esta temporada, se intensifican las labores de prevención y combate de incendios mediante la coordinación de brigadas locales y estatales.
Factores que propician los incendios forestales
La interacción de tres elementos básicos, combustible, oxígeno y calor, es clave para el desarrollo de un incendio forestal, un fenómeno conocido como el «triángulo del fuego».
En el noro, estos factores se hacen más peligrosos debido a la vegetación altamente inflamable, la circulación de vientos secos y cálidos, y las temperaturas que superan los 40 grados Celsius.

Si bien algunos incendios tienen un origen natural, como rayos o altas temperaturas, en México cerca del 90% de los incendios forestales son provocados por actividades humanas. Entre las causas más comunes destacan las quemas agrícolas sin control, el descuido en el manejo de fogatas y la disposición inadecuada de colillas de cigarro.
Además, el cambio climático intensifica el impacto de los incendios forestales. La disminución de lluvias y el aumento de las temperaturas en la región contribuyen a prolongar la temporada de sequías, haciendo que las condiciones sean más propicias para que el fuego se extienda rápidamente.
Consecuencias ecológicas y económicas de incendios forestales
Los incendios forestales no solo devastan la vegetación y la fauna local, sino que también generan daños significativos en los ecosistemas y en la economía de las comunidades afectadas.
La pérdida de hábitats naturales desequilibra cadenas alimenticias esenciales, interrumpiendo procesos biológicos como la descomposición de materia orgánica.
Asimismo, los suelos expuestos quedan más susceptibles a la erosión, lo que limita su capacidad para retener agua y afecta la formación de mantos freáticos.

A nivel atmosférico, la emisión de carbono y otros elementos nocivos intensifica el efecto invernadero, contribuyendo al calentamiento global.
En el ámbito económico, los propietarios de terrenos forestales enfrentan la pérdida de volúmenes de madera, así como una disminución en su productividad agrícola y ganadera.
Además, el combate de incendios genera costos elevados para las autoridades, desde el despliegue de brigadas hasta la implementación de equipos especializados.
¿Cómo prevenir incendios forestales?
La Conafor y el Centro Nacional de Control de Incendios Forestales (Cencif) trabajan de manera conjunta para prevenir y mitigar el impacto de los incendios forestales en México.
Estas instituciones implementan el Programa Nacional de Protección contra Incendios Forestales, que incluye acciones de vigilancia, capacitación y sensibilización en comunidades rurales y urbanas.

Entre las medidas preventivas destacan las campañas educativas sobre el uso responsable del fuego, así como la instalación de torres de observación y la utilización de tecnología satelital para detectar focos de calor en tiempo real.
Además, las brigadas forestales están equipadas con herramientas y vehículos diseñados para enfrentar emergencias en terrenos de difícil acceso.
En caso de un incendio, las autoridades recomiendan no intentar sofocar el fuego por cuenta propia y, en su lugar, reportarlo de inmediato a los números de emergencia. La colaboración entre comunidades y autoridades es fundamental para minimizar los daños y proteger tanto el medio ambiente como la vida de las personas que habitan en zonas de riesgo.

¿Te ha tocado presenciar un incendio forestal?
Fuentes: Protección Civil, National Geographic, El Sol de Toluca