Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el consumo del alcohol provoca la muerte de alrededor 2.6 millones de personas al año

El consumo habitual de alcohol puede desencadenar una amplia gama de enfermedades crónicas como cirrosis hepática, cáncer, enfermedades cardiovasculares, y trastornos mentales, entre otros.
Además, aumenta significativamente el riesgo de accidentes fatales, tanto en la conducción como en actividades cotidianas. Estos efectos adversos pueden tener consecuencias devastadoras que van desde discapacidades permanentes hasta la pérdida de vidas humanas.

Este martes, la Organización Mundial de la Salud (OMS) alertó en un informe sobre el persistente impacto mortal del consumo de alcohol a nivel global. Aunque se ha observado una disminución significativa en las tasas de mortalidad relacionadas, la cifra sigue siendo alarmantemente alta. Según el informe, el consumo de bebidas alcohólicas cobra la vida de aproximadamente 2.6 millones de personas anualmente.
El consumo del alcohol

Recientemente, la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró que el consumo desmedido de bebidas embriagantes puede provocar una de cada 20 muertes al año en el mundo, debido principalmente a accidentes de tránsito, problemas de dependencia o enfermedades cardiovasculares.
Según el estudio de Mortalidad relacionada con el consumo de sustancias psicoactivas 2022, realizado por la Secretaría de Salud en México y la Comisión Nacional de Salud y Adicciones (CONASAMA), en el año 2021 se reportaron 3,631 muertes en México relacionadas principalmente con el consumo de alcohol, tabaco y otras drogas.

Situando al alcohol como la sustancia que ocasionó más muertes relacionadas a su consumo, con una tasa de 2.2 por cada 100 mil habitantes del país.
En 2022, el alcohol fue la sustancia psicoactiva que más causó muertes directamente relacionadas con su consumo en México, con una tasa de 1.9 por cada 100 mil habitantes, totalizando 2 mil 409 defunciones. Además de que es el género masculino quien mayor defunciones tiene al año por esta causa.
Datos según la OMS
En el informe publicado por la Organización Mundial de la Salud, recalca que hay una ligera reducción en la tasa de mortalidad por el alcohol, comparándolo con datos de 2010 pero que las consecuencias por el consumo de estas bebidas sigue siendo alta.

Además, los jóvenes de entre 20 y 39 años constituyen el grupo más afectado, representando aproximadamente el 13 por ciento de todas las muertes relacionadas con el consumo de alcohol cada año.
Este segmento demográfico enfrenta un riesgo significativamente mayor debido a diversos factores, incluyendo la frecuencia y cantidad de consumo, así como comportamientos asociados como la conducción bajo los efectos del alcohol.

Entre las principales causas de muerte atribuidas al consumo de alcohol se destacan los accidentes de tránsito, que provocaron aproximadamente 724 mil fallecimientos por heridas en 2019.
Además, se registraron alrededor de 474 mil muertes debido a enfermedades cardiovasculares relacionadas con el consumo de alcohol, así como 400 mil fallecimientos por diversos tipos de cáncer en ese mismo año. Estas cifras subrayan la grave carga de enfermedad y mortalidad asociada al consumo de esta sustancia a nivel global.
Mitos y realidades del consumo del alcohol
Como todo, el consumo del alcohol también cuenta con una gran variedad de mitos que rodean su consumo. Entre ellos se encuentra la creencia errónea de que beber alcohol solo los fines de semana no causa daños en el organismo, lo cual es totalmente falso. El consumo habitual de alcohol puede llevar a la dependencia y a un patrón de consumo perjudicial para la salud.

Otra muy recurrentes es que, el consumo del alcohol puede ayudarte a superar el cansancio y a estar más animado, lo que no es verdad, pues según expertos el abusar de estas sustancias te hace perder el control de tus emociones y sentimientos.
Una de las creencias más extendidas es que el consumo de alcohol es beneficioso para el corazón. Aunque algunos estudios han sugerido que puede reducir el riesgo de enfermedades cardíacas, es crucial destacar que estos efectos no se observan en todas las personas que consumen alcohol.
Con información del Gobierno de México, Gobierno de España (Ministerio de Sanidad) y El Economista.