En el noroeste, talleres, concursos y redes de mentoría están abriendo camino para que más mujeres y niñas se sumen al mundo tech, acortando una brecha de género que aún persiste.
Grecia Bojórquez/ NORO
En México, las mujeres enfrentan una fuerte desigualdad en el ecosistema emprendedor tecnológico. De acuerdo con la Asociación de Emprendedores de México (Asem), solo el 0.8% de las empresas del sector de informática y tecnología son fundadas por mujeres, frente al 16% que corresponde a hombres. Es decir, existen veinte veces más emprendimientos tecnológicos iniciados por hombres que por mujeres.

Aunque las mujeres emprendedoras han ganado espacio en diversos sectores, el terreno tech sigue siendo uno de los más difíciles de conquistar. Las razones detrás de esta brecha son distintas, pero una de las principales es la falta de acceso a herramientas tecnológicas.
De acuerdo con la misma Radiografía del Emprendimiento en México 2024, solo el 25.2% de las empresas fundadas por mujeres tienen una base tecnológica, frente al 46.6% de las creadas por hombres. Además, los roles de cuidado, que en la mayoría de los casos recaen sobre las mujeres, limitan su tiempo disponible para gestionar o escalar un negocio. En las emprendedoras que son madres, el 23.3% ha cerrado su empresa por falta de tiempo, y el 12.4% por haber sido víctimas de extorsión o robo.

Este contexto plantea un escenario complicado para las mujeres que desean emprender en tecnología. Sin embargo, en el noroeste del país comienzan a surgir iniciativas que buscan revertir esta tendencia desde edades tempranas.
Educación tecnológica desde la infancia en el noroeste: el caso de Sinaloa
Para contrarrestar esta desigualdad, han surgido iniciativas desde etapas tempranas de formación. En mayo de 2024, se llevó a cabo en Culiacán el primer Technovation Girl Sinaloa, un programa internacional de 12 semanas que capacitó a niñas en programación, finanzas, ventas y emprendimiento social. Las participantes desarrollaron aplicaciones móviles que resolvían problemáticas sociales y eran comercialmente viables.

Karla Patiño Leyva, embajadora del programa en el estado, explicó que el objetivo es incentivar que más jóvenes se interesen por carreras en ciencia y tecnología, pues los puestos en tecnología son de los más demandados y mejor pagados, pero solo el 30% son ocupados por mujeres, señaló durante el evento.
La iniciativa proporciona formación técnica, mentoría y oportunidades reales de proyección. Los mejores proyectos tienen la posibilidad de viajar a Silicon Valley con todos los gastos pagados, una motivación extra para que las niñas terminen el programa.
Sonora y Baja California: vocaciones tecnológicas en Sonora
Otra propuesta es el campamento Patrones Hermosos, organizado en Hermosillo, Sonora, por el Tec de Monterrey Campus Sonora Norte en alianza con el MIT. Dirigido a niñas de 13 a 17 años, este espacio busca despertar vocaciones en áreas STEAM (ciencia, tecnología, ingeniería, arte y matemáticas).
El programa se divide en dos niveles: uno básico, donde se enseña diseño web, y otro avanzado enfocado en el lenguaje Python. Además del aprendizaje técnico, el campamento promueve habilidades como el pensamiento lógico, la colaboración y la resolución de problemas.

El objetivo es brindar herramientas desde edades tempranas para motivar a futuras ingenieras. Además, las jóvenes pueden continuar su formación a través de cursos en línea en pensamiento computacional, análisis de datos y design thinking, con constancias oficiales y un modelo de aprendizaje flexible.
Por otro lado, en Baja California, se están generando espacios donde educadoras, científicas y especialistas en tecnología comparten experiencias para fortalecer el aprendizaje en ciencias exactas. Uno de estos foros es el Seminario en Enseñanza de Ciencias Exactas (SENCIEX III), promovido por el Consejo Estatal de Ciencia e Innovación Tecnológica de Baja California.

El evento buscó retroalimentar prácticas educativas entre docentes, investigadores y estudiantes. Aunque no está dirigido exclusivamente a mujeres, representa una oportunidad para fortalecer redes y mejorar los procesos educativos con enfoque en ciencia y tecnología.
EdTechs y juego: otras formas de cerrar la brecha
En el panorama nacional, organizaciones como Laboratoria han demostrado que las plataformas de educación tecnológica pueden tener un impacto importante en la inclusión de mujeres.
En 2022, esta EdTech especializada en formar mujeres en desarrollo web y UX alcanzó 3 mil egresadas; su meta es cerrar 2025 con 6 mil. De ese total, el 87% consigue empleo, 78% reporta aumentos salariales y 20% lidera equipos.

Ofelia Reyes, directora de bootcamp en Laboratoria, explicó para Expansión, que las mujeres enfrentan múltiples barreras, desde estereotipos que las alejan de carreras STEM, hasta la falta de liderazgos femeninos visibles. A pesar de esto, el crecimiento del sector tecnológico representa una oportunidad para modificar ese panorama.
Las cifras muestran que todavía existe una brecha grande entre hombres y mujeres en el emprendimiento tecnológico, pero desde el noroeste en Sinaloa, Sonora y Baja California surgen proyectos que buscan cambiar el panorama.
Con información de Expansión, Noroeste e InfoChannel.










