Grupo de amigos disfruta la experiencia de viajar en kayak desde Punta Chueca, Sonora, hasta San Francisquito, BCS
Un grupo de amigos cruzó en kayak 120 kilómetros a través del Golfo de California, desde Punta Chueca, Sonora, hasta San Francisquito, Baja California Sur. En la travesía se unieron un sonorense y tres franceses, quienes echaron mano de su experiencia para completar el extenso trayecto.

Fue el 1 de junio cuando el sonorense Rogelio Baidon, de 37 años, y los franceses Matthieu Dahirel, Antonie Carayon y Nicolás Carayon, de 34, 37 y 35 años, respectivamente, zarparon para comenzar la aventura de atravesar el Golfo de California. Sin embargo, no imaginaron los obstáculos a los que se enfrentarían. Fueron sus habilidades como excursionistas lo que les permitió sobrellevar las dificultades y llegar a la meta.
A pesar de tener experiencia en recorrer distancias grandes, uno de los viajeros compartió que en algún momento del viaje remaron alrededor de nueve horas sin parar. Fue así como esa travesía se convirtió en la más larga de su vida.

Uno de los contratiempos a los que se enfrentaron fue el calor, pero se turnaban una lona entre los cuatro para tapar los rayos del sol.
“Nos tocó una semana increíble porque las condiciones estaban muy tranquilas y muy bien, pero en San Lorenzo estaba el calor con todo, pero comimos y todo bien, nos fuimos después a la Baja.”
Rogelio Baidon
Gracias a que meses atrás habían realizado un viaje de Tastiota a San Carlos, este grupo de excursionistas pudo conocer los contratiempos que posiblemente surgen cuando se viaja por mar a bordo de un kayak. Sin duda, un poco de experiencia es requerida al emprender un viaje en el que incluso pueden suceder situaciones de riesgo.


A pesar de los problemas, los viajantes aseguran que fue una experiencia única
Durante su viaje visitaron la Isla del Tiburón, San Esteban, Isla Turners y la isla San Lorenzo. Hasta que, posteriormente, llegaron a su destino: San Francisquito. Dentro de este recorrido, hubo ocasiones en las que vislumbraron la posibilidad de regresar a las playas de Sonora. Sin embargo, el ánimo no decayó y continuaron hasta cumplir la meta de recorrer el Golfo de California.

Asimismo, Rogelio mencionó que para su regreso tuvieron que contratar un servicio de pangas. Durante este proceso de retorno avistaron delfines, un tiburón y diversas especies marinas de la zona, lo cual cerró con broche de oro esta experiencia única en la vida.