La propuesta del Congreso de Sonora busca promover el cultivo de flora nativa en los municipios del estado como una alternativa para ahorrar agua y fortalecer la resiliencia urbana.
El Congreso de Sonora propuso medidas para fomentar el cultivo, cuidado y preservación de la flora nativa en los espacios públicos municipales. Esta iniciativa busca no solo ahorrar agua en el riego, sino también fortalecer el desarrollo ambiental y enfrentar los desafíos del cambio climático en la región.
Para lograrlo, se contempla la realización de reformas al Artículo 146 de la Ley de Agua del Estado, así como la implementación de medidas concretas para mejorar el aprovechamiento del agua en la entidad y garantizar la seguridad hídrica.
La propuesta destaca que la flora nativa requiere menos agua para su mantenimiento en comparación con especies no nativas, ya que están mejor adaptadas a las condiciones climáticas de la región.
Además, se establece que las autoridades municipales tendrán la responsabilidad de priorizar el cultivo y preservación de la flora nativa en parques, jardines, áreas verdes, glorietas, camellones y otros espacios públicos bajo su jurisdicción.
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Esta medida no solo promueve la conservación del agua, sino que también busca consolidar una alternativa de mitigación y adaptación al cambio climático y los fenómenos de sequía extrema.
Importancia de la flora nativa en la resiliencia urbana
El doctor Luis Alan Navarro Navarro, experto en medio ambiente, enfatiza la importancia de aumentar la cobertura vegetal en las ciudades como parte de una estrategia integral de resiliencia urbana.
Navarro Navarro destaca la necesidad de utilizar adecuadamente los espacios verdes, enriqueciéndolos con vegetación nativa del desierto y reduciendo el uso de especies exóticas. En Hermosillo existen 145 especies nativas, incluyendo árboles, arbustos, cactus y herbáceas, que podrían ser utilizadas para mejorar la resiliencia urbana y promover un entorno más sostenible.
Desafíos y oportunidades para la reforestación urbana
A pesar de los beneficios evidentes, existen varios obstáculos para la implementación efectiva de esta iniciativa. La escasez de agua, la preferencia por especies exóticas y la falta de disponibilidad de plantas nativas en viveros comerciales son algunos de los desafíos mencionados.
Sin embargo, el vivero del ayuntamiento local podría desempeñar un papel fundamental en la distribución de especies nativas y en la promoción de la reforestación urbana. El objetivo es invertir las proporciones actuales, priorizando el uso de plantas nativas en un 80% y limitando las especies exóticas al 20% restante.
Importancia de las plantas nativas en el medio ambiente
Las plantas autóctonas no solo ahorran agua y reducen la necesidad de sistemas de riego, lo que supone un ahorro en costos para los gobiernos, sino que también sostienen el equilibrio del ecosistema y proporcionan alimento, refugio y sitios de reproducción para la fauna local.
Además, su presencia contribuye a la recuperación de especies vegetales y animales que han sido desplazados por la introducción de especies exóticas.
La paisajista Gisela Ofner destaca la importancia de privilegiar las plantas nativas en lugar de las foráneas en proyectos urbanísticos, plazas y jardines, contribuyendo así a la recuperación de la flora regional y la fauna local.
La promoción del cultivo de flora nativa en los municipios de Sonora representa una estrategia positiva para garantizar la sostenibilidad ambiental, la resiliencia urbana y la conservación de la biodiversidad en la región.
La adopción de estas medidas no solo beneficiará a las generaciones presentes, sino también a las futuras, asegurando un entorno natural saludable y próspero para todos.
¿Opinas que se debe plantar flora nativa en las ciudades?
Fuentes: Congreso del Estado de Sonora, El Colegio de Sonora, Clarín
