Mujeres y ciencia: Karolina Zepeda, la hermosillense que impulsa la divulgación científica

Una joven hermosillense es pionera en la divulgación de la ciencia, principalmente aquella desarrollada por mujeres. Desde 2017 dirige la página web Sólo es Ciencia

Karolina Zepeda Cota tiene 25 años y ya cuenta con una trayectoria profesional relevante en el ámbito de la divulgación científica. La joven hermosillense fundó el portal web Sólo es Ciencia en 2017, una página destinada a la divulgación de la ciencia. La periodista e ingeniera busca hacer especial énfasis en las mujeres científicas y su trabajo.

Desde su creación, el portal se ha convertido en un referente de la divulgación científica entre entusiastas y conocedores de la ciencia. En promedio recibe alrededor de 30 mil visitas mensuales. Además, también dirige la página de Facebook del portal, donde cuenta con más de 18 mil seguidores.

Karolina Zepeda, originaria de Hermosillo, acaba de graduarse con dos títulos universitarios. Es licenciada en Periodismo por la Universidad Kino e ingeniera en Telecomunicaciones por la UNAM.

Steminist: un lugar para hablar solo de mujeres en la ciencia

En Sólo es Ciencia hay 63 colaboradores de Latinoamérica que buscan arrojar luz en el ámbito científico, un área un poco olvidada en los principales medios de comunicación. Dentro de la página, Karolina Zepeda creó la sección Steminist, con artículos exclusivamente dedicados a las mujeres científicas, tecnología, ingeniería y matemáticas.

“Son mujeres que han luchado por un lugar para nosotras, que han sido ocultadas u olvidadas“.

Karolina Zepeda Cota, divulgadora de la ciencia.

La joven hermosillense dijo a Corriente Alterna, revista de la UNAM, que Steminist nació de un berrinche. Al buscar información en Internet acerca de mujeres científicas y su obra, se dio cuenta de que no había mucho al respecto. Fue ahí cuando decidió crear su propio medio.

En Sólo es Ciencia podrás conocer la vida y trabajo de grandes mujeres científicas, como Rosalind Franklin, científica pionera en el estudio del ADN. Así como de Marie Anne Lavoisier, madre de la química moderna, o Ada Lovelace, la primera programadora de la historia.