Para muchos cineastas, el Desierto de Sonora es perfecto para rodar una nueva película.
El Desierto de Sonora ha sido escenario de diferentes películas a lo largo de la historia. Este paisaje que abarca Sonora, en México, y el sur de Arizona, en Estados Unidos, se ha convertido en el escenario ideal para formar parte de la narración de proyectos cinematográficos de distintos géneros.
Estas son cinco películas que se han rodado en el Desierto de Sonora.
Ubicada en el Desierto de Altar, esta película transporta a los espectadores a 1937, reviviendo la historia de cinco trabajadores seleccionados para una tarea: redefinir la ruta del ferrocarril que unirá Mexicali con el resto de México.
La trama se desarrolla en la década de 1930, una época en la que México, bajo el liderazgo cardenista, se esforzaba por impulsar señales renovadas de progreso. Entre estos esfuerzos se encontraba la ambiciosa expansión de la red ferroviaria. La Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas (SCOP), consciente de los desafíos que esto conlleva, veía este proyecto como una hazaña casi inalcanzable. No obstante, depositaron su confianza en Manuel, encarnado por David Reynoso, reconociendo que solo un líder de su calibre podría emprender la encomienda.
Los obstáculos eran evidentes: condiciones climáticas implacables, recursos técnicos limitados y desafíos financieros. A pesar de estas adversidades, la autoridad y experiencia del Mayor brindó esperanza a los funcionarios. Con su nombramiento como jefe principal de la División del Sur, la misión cobra nueva vida y promete ser un símbolo de tenacidad y determinación en medio de la aridez del desierto.
En 1998 se estrenó “La Máscara del Zorro”, película estadounidense basada en el personaje creado por Johnston McCulley.
Dirigida por Martin Campbell, la cinta cuenta con un elenco que incluye a Antonio Banderas, Catherine Zeta-Jones, Anthony Hopkins y Stuart Wilson.
La trama sigue a Don Diego de la Vega (Hopkins), el Zorro original, quien tras años en prisión busca vengarse de Rafael Montero (Wilson) y proteger a su hija Elena (Zeta-Jones) mientras entrena a un joven bandido. A su vez, Elena se enamora del nuevo Zorro, Alejandro Murrieta (Banderas).
La historia se desarrolla en 1821 durante la lucha mexicana por la independencia del Imperio español. Don Rafael Montero, gobernador de Alta California, intenta capturar al misterioso espadachín El Zorro. Montero ejecuta campesinos para atraerlo, pero El Zorro, con el apoyo de la comunidad y la ayuda de dos huérfanos, desafía a Montero y deja su marca en él. Esta película es un viaje de venganza, amor y justicia en un contexto histórico crucial.
El escenario del municipio de Magdalena de Kino se transformó en el escenario de fondo para las grabaciones de la película de Hollywood, “Rápido y Furioso 4”.
Junto a las estrellas principales, Vin Diesel y Paul Walter, una multitud de actores secundarios se sumaron al rodaje de esta película de acción que gira en torno a la velocidad y los vehículos.
La colaboración entre la empresa mexicana Art In Motion México, S.A. de C.V., la estadounidense FF4, L.L.C., y figuras de la producción como Michael Fottrell y Ricardo Del Río, junto al director Justin Lin, ha concluido que el estado de Sonora proporciona un escenario excepcional para dar vida a esta película.
En un próximo escenario en México, una misteriosa problemática surge: la gradual desaparición de mujeres. En este contexto, una joven se ve obligada a ocultar su identidad de género tras una máscara.
Su ocupación consiste en colaborar con su padre en el mantenimiento de un terreno de béisbol en desuso, que ha sido adoptado como sitio de encuentro por los narcotraficantes.
Con el respaldo de sus compañeros, se embarca en una lucha para trascender su realidad y enfrentar al líder del crimen local. Todo este intrigante relato cobra vida en la pantalla bajo la dirección de Julio Hernández Cordón.
Hace casi un siglo, en 1931, un grupo de personas emprendió un viaje con un propósito claro: encontrar paz en Mexicali, huyendo de las deportaciones y el cierre fronterizo impuestos por Estados Unidos tras años de agitación en Sonora.
En un Chrysler 1929, conducido por una mujer, se unieron dos mujeres mexicanas, militares, un indígena y chamán y su sobrino deportado de Estados Unidos.
La travesía no estuvo exenta de dificultades. Una familia chino-mexicana, víctima de maltrato en Sonora, y otros viajeros como un estadounidense y un chicano, se sumaron al grupo, desencadenando conflictos y tensiones. El desierto se volvía parte ante el racismo, la avaricia y la paranoia que acechaban en Sonora.
Inspirada en “La ruta de los caídos” de Guillermo Munro Palacio, esta narración refleja la lucha por la supervivencia en medio de un paisaje desafiante y un contexto social aún más difícil, resaltando la búsqueda inquebrantable de esperanza en malos tiempos.
Fuentes: Relatos e historias, Vanguardia, Ficunam, Sensacine
La Feria Santa Rita fue testigo de un curioso logro en Chihuahua, donde 607 entusiastas…
El Yu-Mex, una fusión de música tradicional mexicana y talento yugoslavo, hizo bailar a un…
La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) dio a conocer los diferentes factores a considerar al…
Casa Valentina brinda alojamiento a aquellos niños y adolescentes que lo necesiten durante su tratamiento…
Baja California Sur es la entidad más vulnerable a los ciclones tropicales en la temporada…
El observatorio ubicado en Cananea, Guillermo Haro, ha sido pionero por más de 37 años…