La práctica de firmar la renuncia es una solicitud común que se hace a los empleados al entrar a un nuevo trabajo. Pero, ¿es legal?
En algunos casos, las empresas exigen a sus empleados firmar una renuncia anticipada al momento de ser contratados. Esta práctica, que se presenta bajo la justificación de proteger los intereses del empleador, plantea interrogantes sobre su legalidad y las repercusiones que tiene para los trabajadores.
La práctica de solicitar la firma de una renuncia anticipada durante el proceso de contratación, lamentablemente, es una situación que enfrentan muchos trabajadores en México al momento de estar en la búsqueda de empleo.
De acuerdo con la Ley Federal del Trabajo (LFT), exigir la firma de una renuncia anticipada es una práctica ilegal. Cuando esta renuncia se solicita como condición para ser contratado, se infringen los derechos laborales del trabajador.
El artículo 48 bis, inciso B, de la LFT, establece que no se puede exigir la firma de papeles en blanco en la contratación o en cualquier momento de la relación laboral. Y que además, alterar un documento firmado con un propósito distinto, como incorporar una renuncia, es considerado una actuación improcedente.
Las empresas que incurren en estas prácticas pueden enfrentar sanciones económicas severas, que oscilan entre los 10 mil 374 y los 103 mil 740 pesos mexicanos.
Firmar una renuncia anticipada tiene serias implicaciones para el trabajador, pues de acuerdo con el artículo 53, fracción I, de la LFT, una vez que el trabajador firma su renuncia, pierde el derecho a una indemnización y a la prima de antigüedad, excepto si ha trabajado más de 15 años en la empresa.
Solamente se tendrá derecho al pago de las prestaciones generadas hasta ese momento, como aguinaldo, vacaciones y prima vacacional, es decir, al finiquito y no a una liquidación completa.
Esto coloca al trabajador en una posición de desventaja, pues la renuncia anticipada facilita que la empresa evite pagar indemnizaciones que le corresponderían en caso de despido injustificado. De hecho, si la empresa presenta este documento en un conflicto laboral, el trabajador podría tener dificultades para demostrar que fue obligado a firmarlo bajo coerción o engaño.
Si durante el proceso de contratación o en cualquier momento de la relación laboral te solicitan firmar una renuncia anticipada, tienes varias opciones para protegerte:
Si ya has firmado una renuncia anticipada o una hoja en blanco, y luego te despiden usando estos documentos, puedes tomar las siguientes acciones:
La jurisprudencia reciente del Poder Judicial de la Federación también indica que los tribunales deben considerar exhaustivamente las circunstancias que rodearon la firma de la renuncia cuando se alega coacción.
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