EFE/EPA/ADAM DAVIS
Dos personas fueron localizadas sin vida en el muro de boyas que colocó el gobierno de Texas en el Río Bravo.
A 20 días de ser colocado, el muro flotante ya cobró sus primeras dos vidas. Dos cuerpos fueron hallados el pasado miércoles en la barrera de boyas que instaló el gobierno de Texas, en el Río Bravo.
La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) confirmó la localización de dos cuerpos sin vida.
El cuerpo de uno de los fallecidos se trata de Nelson Rolando García Cruz, originario de Honduras, de 29 años de edad.
Foto recuperada de Pie de Página
“Autoridades del Departamento de Seguridad de Texas notificaron al Consulado de México en Eagle Pass que (…) encontraron el cuerpo de una persona sin vida atorado en la parte sur de las boyas”, compartió la SRE desde su cuenta oficial de Twitter
El primer cuerpo fue localizado por autoridades estadounidenses a las 14:35 horas del miércoles, en la parte sur de las boyas, alrededor del municipio de Eagle Pass.
“Autoridades del Departamento de Seguridad de Texas notificaron al Consulado de México en Eagle Pass que encontraron el cuerpo de una persona sin vida atorado en la parte sur de las boyas”, señaló la cancillería mexicana en un comunicado.
Posteriormente, un equipo del Instituto Nacional de Migración halló el segundo cuerpo cerca de la ciudad de Piedras Negras.
Las boyas, junto con alambre de púas, fueron colocadas a inicios de julio por orden del gobernador de Texas, el republicano Greg Abbott, para bloquear el paso de migrantes desde territorio mexicano.
Se trata de una valla de 350 metros de largo compuesta por enormes boyas naranjas que separan Eagle Pass, en Texas, de Piedras Negras, en Coahuila. La instalación se realizó sin contar con permisos de ninguna de las administraciones federales.
Abbott anunció el despliegue de estas boyas en el Río Bravo como una medida para frenar la migración y acusó al gobierno del presidente Joe Biden de no hacer nada al respecto.
Según reportes de varios medios, algunos migrantes han sido rescatados al quedar atrapados en dicha barrera, ante esto, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador calificó esta medida como una “provocación” que viola la soberanía del país.
El mandatario mandó una nota diplomática al vecino país para manifestar su enojo, 10 días después el gobierno de Joe Biden demando a Texas por la medida.
En la demanda presentada el pasado lunes, el Departamento de Justicia de Estados Unidos pide a un tribunal que obligue a Texas a quitar la barrera, la administración de Joe Biden afirma que el muro flotante plantea problemas humanitarios y medioambientales.
Esta acción sostiene que Texas vulnera la Ley de ríos y puertos de 1899, en la que se establece que Abbott tenía que haber pedido autorización primero.
La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) reclamó que la barrera flotante viola la soberanía mexicana e impacta la seguridad, integridad y derechos humanos de los migrantes.
“Reiteramos la postura del gobierno de México sobre que la colocación de boyas alambradas por parte de las autoridades de Texas es una violación a nuestra soberanía.
“Externamos nuestra preocupación sobre el impacto a los derechos humanos y seguridad personal de los migrantes que tendrán estas políticas estatales que van en sentido opuesto a la estrecha colaboración entre nuestro país y el gobierno federal de Estados Unidos”, emitió la SRE en el comunicado.
Fuentes: El Financiero, El País, France 24 y Milenio.
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