¿Por qué hay personas que toman clorofila?

Es posible que hayas visto muchas veces que algunas personas se hidratan con agua de color verde que elaboran con clorofila. La clorofila es un pigmento que se encuentra en las plantas y algunas algas. Consumirla trae algunos beneficios que quizás desconoces. Sigue leyendo este artículo para conocer más sobre ella y que lo hace tan especial.

¿Qué es la clorofila?

La clorofila es un compuesto que se encuentra principalmente en las plantas, aunque también podemos encontrarlas en ciertas algas y bacterias. Se le conoce dos funciones principales: la primera es que sus pigmentos funcionan para aportar el color verde a los vegetales y la segunda es que es indispensable para que las plantas puedan hacer la fotosíntesis, junto con la luz.

Esta planta se descubrió en 1817, gracias a los químicos franceses Pierre Pelletier y Joseph Caventou, quienes consiguieron aislarla de las hojas de las plantas. Ambos científicos utilizaron métodos que les permitieron aislar varias sustancias de importancia farmacológica como la cafeína o la quinina, por mencionar algunos.

Tiene una estructura muy parecida a la sangre en los seres humanos y dentro de sus propiedades destacan las siguientes:

Antioxidante: porque sus altos niveles de Vitamina A, C y E la convierten en un poderoso antioxidante para la salud.

Antiinflamatoria: dichas propiedades la convierten en una sustancia importante para ciertos tratamientos como la artritis. Actúa y combate el crecimiento de las inflamaciones provocadas por algunas bacterias.

Desintoxicante: es perfecta para oxigenar al organismo y ayuda a mejorar el funcionamiento de los órganos.

Desodorizante: ayuda a combatir bacterias de la boca y mejora el aliento.

¿Por qué consumir clorofila? Conoce sus beneficios.

La clorofila contiene propiedades que pueden aportar algunos beneficios para tu salud. Entre los que podemos destacar que:

Funciona como tratamiento para la artritis. Al ser un compuesto antiinflamatorio, es eficaz para frenar el aumento de inflamaciones producidas por bacterias.  Lo cual la convierte en una sustancia  que es muy eficaz para tratar la artritis.

Desintoxica el organismo. Sus cualidades purificadoras contribuyen a eliminar toxinas e impurezas del cuerpo y también a mejorar el flujo de la sangre a través del cuerpo. Es por ello que se recomienda consumirlo en batidos a base de vegetales que actúan como depuradores del organismo. 

Facilita la digestión. Como mencionamos en el punto anterior,  es excelente para depurar, por lo que mejora la digestión y facilita el trabajo intestinal. De tal forma que también funciona como una sustancia eficaz para combatir el estreñimiento.

Fortalecimiento de huesos. La clorofila contiene magnesio el cual tiene un efecto sobre los huesos. Ayuda a su crecimiento y al mantenimiento de ellos. 

Favorece la cicatrización de la piel. Se ha demostrado que la clorofila tiene efectos que ayudan a reducir la inflamación y crecimiento de bacterias en las heridas de la piel. A lo largo del 2015 se realizaron varios estudios en donde personas con acné y poros grandes observaron mejoras en su piel después de usar productos que contienen clorofila. 

Combate problemas hormonales. Debido a su contenido de Vitamina E, la clorofila aporta propiedades antioxidantes, lo cual estimula la fabricación de hormonas masculinas y femeninas (testosterona y estrógenos).

Mejora la oxigenación de la sangre. La clorofila contribuye a oxigenar la sangre y esto repercute de forma positiva en el estado de los órganos vitales, como el corazón. 

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Más beneficios de la clorofila

Contribuye a conservar y mejorar la memoria.

Funciona como desodorante natural porque ayuda a neutralizar olores.

Se le relaciona con la pérdida de peso. Aunque no existen estudios actuales que lo determinen, se cree que puede favorecerla.

Reduce la incidencia de tumores cancerígenos.

Erradica la caspa cuando se aplica sobre el cuero cabelludo.

Disminuye triglicéridos y niveles de colesterol.

Ayuda a reforzar el sistema inmunitario.

Mejora el rendimiento físico ya que favorece la tonificación y la relajación muscular.

¿Cómo se toma la clorofila?

Recuerda que antes de tomar cualquier remedio casero o natural como la clorofila, te recomendamos acudir a tu médico.

La clorofila se toma a través del consumo de vegetales verdes. Entre los que destacan alimentos como la lechuga, la espinaca, el perejil, el berro, el apio, etc. El consumo de los vegetales siempre se recomienda en crudo porque mantiene las cantidades originales de clorofila en el alimento.

En herbolarias y otras tiendas especializadas, también podrás conseguir la clorofila en polvo o líquida, o bien en cápsulas.

Antes de tomar clorofila…

Consulta a tu médico antes de probar la clorofila porque existen algunas contraindicaciones del producto. Entre las que podemos mencionar son problemas estomacales, los picores e irritaciones como efectos secundarios o diarrea. No es recomendable para mujeres embarazadas o lactantes.

Este artículo es únicamente informativo, verifica con tu médico antes de tomarla, porque podría interactuar negativamente con algún medicamento que estés tomando.