¡Contenido nuevo cada semana! 25 FEBRERO – 15 MARZO
noro china logo light
noro china logo 3

Capítulo 2

Entre dragones y desiertos, la herencia cultural

Los migrantes chinos que llegaron a territorio sonorense se enfrentaron al primer desafío de adaptarse a un nuevo lugar: el clima del “Desierto de Sonora”.

Con un clima seco a muy seco, con pocas precipitaciones al año y donde las temperaturas máximas pueden registrar alrededor de 50 grados centígrados durante casi 9 meses, comparado con el clima de Cantón, provincia de China, de donde eran originarios la mayoría de los migrantes.

En Cantón, la temperatura general varía entre 11 y 33 grados centígrados durante el transcurso del año, y la temporada calurosa dura poco más de 4 meses.

noro china c2 main

Los chinos se adaptaron al extremo clima sonorense y trabajaron al “ras del sol”, construyendo las vías del ferrocarril y realizando excavaciones en las minas.

El choque cultural con las costumbres de Sonora no fue impedimento para que los chinos conservaran sus tradiciones. Para empezar, comenzaron a comer con cubiertos en lugar de palillos, e incluso cambiaron o sustituyeron ingredientes orientales por alimentos de la región. Optaron por sembrar en sus casas vegetales, algo que no era muy común en el Estado en aquella época.

Practicaban su religión según la costumbre, ofreciendo un altar los días 15 y 30 de cada mes como agradecimiento a Buda por los días de prosperidad.

Pioneros como Don Joaquín Lee Zarate y Fernando Chow organizaron la preservación de las costumbres chinas en Sonora.

Con el propósito de conservar y transmitir a futuras generaciones de descendientes chinos las costumbres, tradiciones y religión de su cultura, Don Joaquín Lee Zarate y Fernando Chow fueron los pioneros en organizar a las familias chinas para realizar los festejos que acostumbrarían si vivieran en su país de origen.

Celebración de Día de la Independencia china y medio otoño con carne asada

La primera celebración es el festejo del Año Nuevo Chino, más conocido como “La Fiesta de la Primavera”, que según el calendario chino no es un día fijo, sino que cambia según el movimiento de la Luna. Aproximadamente, es entre la última semana de enero y las primeras dos semanas de febrero. En la antigua China, para numerar los años se aplicaba el uso de los títulos de los emperadores y del sistema celeste ganzhi. Así, en el año 2937 a.C. se elaboró el primer calendario lunar chino, distribuido en cinco ciclos de doce años cada uno. Fue a partir de la dinastía Han del Este (25-220) cuando los chinos comenzaron a usar los doce signos de animales en orden –Rata, Buey, Tigre, Conejo, Dragón, Serpiente, Caballo, Cabra, Mono, Gallo, Perro y Cerdo–. Al igual que los signos del zodiaco occidental, que también son doce, estos marcan de alguna manera la personalidad de cada individuo.

Los platillos originales de China se presentaban en los festejos, ofreciendo una mezcla de sabores y tradiciones.

La comunidad china se reúne en alguno de los restaurantes de propietarios chinos. Algo importante de su disciplina es que, incluso en la noche de Año Nuevo, en su cultura no se interrumpen los horarios laborales. Comienzan a llegar cada una de las familias, conformadas en su mayoría por el matrimonio, hijos (solteros o con sus parejas) y nietos. El anfitrión da la bienvenida y, de vez en cuando, acude a revisar en la cocina que todo quede en orden para ofrecer el banquete.

También se presentan en este festejo las danzas “Del Dragón”, “De los abanicos” y la “Danza del León”, que es la más importante, ya que con ella da inicio el Año Nuevo. Los leones desfilan entre las mesas llevando la buena fortuna a todos los presentes, realizando movimientos y piruetas al ritmo de los gongs.

Esta parte es muy importante de las festividades chinas, ya que se piensa que el león es el rey de todos los animales y se considera una mascota que puede proteger de la mala suerte y de las desgracias, a la vez que trae paz y prosperidad.

Las celebraciones, que antes eran exclusivas de la comunidad china, ahora involucran a autoridades locales y descendientes, promoviendo la inclusión y la difusión cultura.

Las danzas son representadas por jóvenes sonorenses, alumnos del idioma chino de la Universidad de Sonora, ya que es la maestra que imparte la clase quien organiza las presentaciones.

A pesar de ser una subcultura, conservaron la celebración de “Medio otoño” y el día de la Independencia de la República Popular China, en el mes de octubre. Al igual que en Año Nuevo, preparan los platillos originales, pero en esta ocasión, también preparan un postre que ofrecen a la Luna: la galleta o pastelillo lunar. En esta celebración no hay danzas, pero se presenta un discurso recordando los hechos históricos del pueblo de China cuando en 1949 Mao Zedong declaró la creación del país luego de años de guerra civil tras la caída del último Emperador en 1911, dando inicio a la historia de la moderna China.

En estas dos celebraciones, hasta hace un par de años solo asistían integrantes de la comunidad china. En la actualidad, invitan a autoridades locales y descendientes de aquellos primeros migrantes chinos que llegaron al Estado, mostrando disponibilidad e interés en mostrar sus tradiciones y parte de su forma de vida oriental a la cultura dominante, la sonorense.


Chong, J. (2015). “Chinos masones”. La logia Chee Kung Tong en México. Scielo. Recuperado de: Revista de Estudios Históricos de la Masonería Latinoamericana y Caribeña

Soto-Quirós, R. (2007). Los chinos de ultramar: represiones, resistencias y resiliencias. Palabra de Clío. Recuperado de: Los Chinos de Ultramar: Represiones, Resistencias y Resiliencias

Tanori, M. (2018). Llegaron para quedarse: Etnografía de la comunidad china de Hermosillo (informe de investigación no publicado).

Valdés, V. (2006). México y China: Del galeón de manila al primer tratado de 1899. Estudios de Historia Moderna y Contemporánea de México. Recuperado de: México y China: del galeón de manila al primer tratado de 1899