La Bruja de Texcoco, una disidente musical que explora los sonidos del noroeste

En su segunda ocasión en Hermosillo, La Bruja de Texcoco reafirmó su conexión con el noroeste con corridos y música

La primera vez que La Bruja de Texcoco visitó Hermosillo lo hizo en el evento Posadelic, en 2019. Fue justo antes de la llegada de la pandemia que silenció a un gran número de músicos en México y el mundo. Este 2021, la artista ícono de la comunidad LGBT+ regresó a Sonora para una presentación musical. 

“Regresar a Hermosillo es muy significativo para mí, sobre todo por la gente linda que conocí. Visité la Isla del Tiburón e incluso este año hice sapo. Tengo una conexión muy linda con el norte”, contó La Bruja de Texcoco en entrevista con NORO.  

La cantante sintió que regresó a Sonora como una persona diferente. Esto debido al proceso emocional que experimentó en la pandemia, uno de soledad y vulnerabilidad. Sin embargo, para La Bruja fue un tiempo que le regaló la posibilidad de escribir su segundo disco, Tepari. 

“El álbum habla de este proceso de estar sola, ver lo importante de entender los ciclos de la vida y las personas. A veces estamos con alguien y luego no, momentos, lugares y familia. Nos cuesta entender los ciclos, empezarlos es lindo pero cerrarlos también y de eso va mi disco”, expresó. 

La Bruja de Texcoco y sus nuevas canciones

Tepari será lanzando sencillo por sencillo. En plataformas de música ya se puede escuchar el tema de El Diablo y la Bruja, una canción que, como el resto de su repertorio, toma lo esencial de la música tradicional mexicana y le da su propio estilo. Sin embargo, las nuevas composiciones ya las interpreta La Bruja de Texcoco en escenarios, incluyendo nuevos sonidos. 

“A mí me encanta el folclore mexicano y parte de ello es la música del norte. Los corridos, las bandas, y justo mi disco tiene dos corridos tumbados. Es algo lindo poder experimentar el sonido de diferentes lugares, México es un país basto en música y me encantaría también hacer banda”, reveló.

Los corridos que agregó a su nuevo repertorio se llaman Lluvia y San Antonio, besos de desamor para borrachas. Además, La Bruja de Texcoco contó que Tepari tendrá colaboraciones con otros artistas con quienes asegura que hizo una conexión especial. Antes ya había hecho música junto a María León, Ruben Albarrán y Renee Goust.  

NORO: ¿Qué te inspira actualmente?

La Bruja de Texcoco: En los últimos conciertos que he hecho la gente canta mis canciones. Eso me rompe, es emotivo y se siente tan bien. Es una energía tan fuerte que me paraliza y es un regalo. Mi proyecto es independiente y siempre tengo que estar al pendiente de todo, pero he encontrado a personas que creen en mi trabajo y me apoyan. Todo eso se refleja al momento de un concierto. 

NORO: ¿Cuáles son las metas y sueños que tienes en este momento?

La Bruja de Texcoco: Estoy en un proceso de poder sanar. Me di cuenta de que mi cuerpo es muy importante, me di cuenta de lo importante que es mantener la salud super chida. Como que ahorita estoy muy metida en mí y mi corporalidad. Tener cuerpo y mente sana es mi prioridad. 

NORO: ¿Qué tan importante es para ti involucrarte en la lucha y protección de los derechos de la comunidad LGBT+?

La Bruja de Texcoco: Para mí es importante mostrar desde mi trinchera, que es la música, cómo soy y normalizar estas experiencias de vida. Lamentablemente, hay un tema con la violencia que sigue siendo tangible y real. Me gusta ser yo y contar mi experiencia para que otras personas puedan salir a la calle sin temor a ser juzgadas o violentadas. 

Hablo desde mi experiencia como una mujer trans, no binaria, disidente y real. Incluso dentro de la comunidad hay muchos estigmas y limitantes. Una persona me comentaba que si qué recomendaba a quienes salían del clóset y dije: ‘híjole, si tienes esa necesidad de hacerlo prepárate porque van a ser más de uno’.

Hay muchas puertas que romper y yo las viví. Pensaba que saliendo (del clóset) iba a tener un cambio real, pero es un trabajo constante. Me di cuenta que no solo era salir del clóset como un hombre gay, que era como me consideraba. Yo no me sentía parte de la cultura gay hegemónica de la que todos estamos acostumbrados. 

Todos quieren un cierto tipo de corporalidad, alta y blanca. Pero las corporalidades mexicanas y latinoamericanas no somos eso, somos personas morenas y distintas. La disidencia existe en nosotres, somos las verdaderas personas disidentes. 

Dentro de la diversidad existen minorías que nos siguen limitando y por eso estoy aquí. Soy una mujer trans, alta, morena, con barba, grande, gorda y marica, eso es lo chido. 

Conoce más de La Bruja de Texcoco en este documental nominado a los Premios Ariel, dirigido por Alejandro Paredes.