La espera fue larga para los Xolos de Tijuana. Sin embargo, parecen estar llegando a su fin los partidos a puerta cerrada tras el primer juego con afición después de 16 meses de pandemia. Esto sucedió el miércoles 14 de julio en un partido amistoso que se dio contra Mazatlán, mismo que terminó en empate cero a cero.
Este partido marca lo que podría ser el regreso al Estadio Caliente. En Baja California, según reportó la Secretaría de Salud del Estado, ya hay un índice de vacunación del 72% en la población elegible. Por esto fue posible reabrir las puertas del estadio para quienes presentaran un certificado de vacunación.
Para el encuentro en la cancha las autoridades permitieron un aforo de 60% de la capacidad del recinto, pero según reportó la oficina de prensa del equipo rojinegro, se tuvo una afluencia del 10%, o sea, cerca de 3 mil 500 aficionados.
La baja asistencia al Estadio Caliente pudo deberse a que se anunció el evento un día antes del partido, pues el permiso por parte de las autoridades de gobierno tardó en otorgarse. De igual forma, el evento solo podía disfrutarse por aquellas personas que tuvieran un XoloPass.
“Jugar con la gente, apoyándonos, el simple hecho que estén ahí ya es una emoción diferente”.
Javier Llausas, gerente de comunicaciones de Xolos.
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Si bien uno de los principales requisitos para ingresar al partido fue el comprobante de vacunación, esa no fue la única medida. De igual manera, se solicitó a la afición no quitarse el cubrebocas en ningún momento, razón por la cual tampoco se contó con venta de alimentos o bebidas en el partido.
Tampoco era posible llevar menores de 12 años o ingresar al estadio con mochilas o bolsas de mano. Asimismo, no se permitió acceso temprano al estacionamiento para evitar reuniones. También se siguieron las ya conocidas medidas de seguridad.
El club de los Xolos reconoció que las medidas modificaron la dinámica de convivencia en el juego, pero confió en que este sea el primer paso para continuar con los encuentros a puerta abierta, pues la Secretaría de Salud advirtió que de presentarse un aumento de casos se volverían a clausurar los eventos masivos.
Al final, el objetivo será demostrar que los tijuanenses tienen todas las condiciones para permitir el ingreso de personas al primer juego del torneo de apertura 2021 que se programa para el domingo 25 de julio contra los Tigres de la UANL.
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