Las redes sociales tienen un lado oscuro con peligros oculto para la salud mental de los jóvenes. Expertos en psicología y psiquiatría advierten sobre los riesgos que existen en el internet.
En la era digital, los influencers de redes sociales y los llamados coaches de vida han permeado en la vida de los jóvenes de una manera sin precedentes. Sin embargo, detrás de esas imágenes retocadas y consejos aparentemente motivadores, se esconde una amenaza silenciosa para la salud mental de esta generación.
El presidente del Consejo Directivo del Colegio de Psicólogos, Alejandro Olivares, advierte sobre los riesgos que los influencers y coaches representan para la salud mental de los adolescentes, señalando que seguir a estos “formadores” puede conducir a trastornos como la depresión, la ansiedad e incluso el pensamiento suicida.
Según el experto, muchos influencers promueven el individualismo extremo, instando a los jóvenes a valerse por sí mismos y buscar un espacio personal a toda costa. Este enfoque, según el experto, no solo va en contra de la naturaleza humana, sino que también puede generar traumas en los jóvenes al hacerles creer que deben enfrentar el mundo sin guía y apoyo de figuras formadoras, como sus padres.
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La obsesión con el derecho al individualismo, señala Olivares, ha llevado a la disminución de la convivencia familiar, dejando a los adolescentes aislados emocionalmente.
La falsa la resiliencia
Los coaches, por otro lado, venden la idea de la resiliencia extrema, utilizando técnicas cuestionables como caminar sobre llamas, metafóricamente hablando, o vivir situaciones humillantes para forjar una supuesta fortaleza.
Sin embargo, este enfoque puede resultar contraproducente, ya que los jóvenes se ven frustrados al no poder alcanzar los estándares poco realistas establecidos por estos “modelos”.
La presión por mostrar fortaleza impide que los adolescentes compartan sus verdaderas emociones con sus padres, creando un silencio emocional, que según los expertos, puede ser peligroso.
Instagram: la cara sin filtro de la realidad
Las redes sociales, especialmente Instagram, contribuyen significativamente a la presión que enfrentan los jóvenes. La necesidad de mantener una imagen idealizada en línea puede generar comparaciones poco saludables, disminuyendo la autoestima y desencadenando problemas de salud mental.
La plataforma, diseñada para enganchar a los usuarios, puede amplificar problemas psicológicos y contribuir a la soledad. Investigaciones recientes de la Universidad de Pennsylvania han demostrado la conexión causal entre el uso de Instagram y la depresión, la ansiedad y la sensación de exclusión.
El Psiquiatra y Psicoterapeuta José Miguel Gómez, comentó en entrevista para el programa Esferas de Poder, que una de las consecuencias que trae consigo la adicción a redes sociales en los jóvenes es abandonar responsabilidades y proyectos personales y educativos para sumergirse en el mundo digital de manera compulsiva.
Comparación constante genera problemas de salud mental
Los influencers, que van desde youtubers, hasta tiktokers e instagramers, se han convertido en ídolos aspiraciones para millones de jóvenes. Sin embargo, esta fascinación puede tener consecuencias negativas, ya que los niños y adolescentes buscan ser diferentes y auténticos, a menudo transgrediendo patrones culturales y sociales.
Además, la conexión constante con estos influencers a través de las redes sociales puede contribuir a la desconexión de la realidad y problemas asociados al uso compulsivo de internet.
La comparación constante con otros usuarios, la exposición a imágenes retocadas y la búsqueda desesperada de validación a través de interacciones virtuales pueden contribuir a problemas de salud mental como depresión, ansiedad, fobia social e incluso trastornos alimenticios.
Necesidad de acciones preventivas
Ante el impacto negativo de influencers y coaches en la salud mental de los jóvenes, los expertos en Psicología recomiendan que se implementen acciones preventivas y de control en los medios digitales.
Recomiendan una colaboración entre la sociedad y las instituciones educativas para abordar el fenómeno, involucrando a profesionales como psicólogos, psiquiatras, educadores y sociólogos .
También ven fundamental que los padres estén conscientes de las actividades en línea de sus hijos, fomentando la comunicación abierta y brindando apoyo emocional. La detección temprana de situaciones problemáticas y la búsqueda de ayuda profesional son pasos cruciales para contrarrestar los efectos negativos de influencers y coaches en la salud mental de los jóvenes.
¿Consideras que los influencers y coaches tienen un impacto en tu manera de pensar?
Fuentes: Z Digital, El Heraldo de Chihuahua, El Cierre Digital
